Yachting


Rolex Sidney Hobart Yacht Race 2008

EL SKANDIA SORPRENDE AL WILD OATS XI

Tres barcos retirados, uno de ellos hundido
27 de diciembre de 2008

El Skandia de Grant Warrington continúa liderando la 64ª edición de la Rolex Sydney Hobart por delante del Wild Oats XI, rompiendo todas las previsiones, incluida la del propio patrón australiano. "En condiciones normales, creo que Wild Oats sería dos horas más rápido que nosotros llegando a Hobart sólo por su diseño, cuatro años más moderno", indica Warrington.


Skandia: Foto Rolex/Carlo Borlenghi


Skandia: Foto Rolex/Carlo Borlenghi

Ambos barcos cuentan con una eslora de 98 pies (30 metros) y disponen de quilla pivotante. El Skandia tiene diseño de Don Jones de Melbourne, mientras el socio de San Diego de John Reichel and Jim Pugh es el responsable de las líneas del Wild Oats XI de Bob Oatley. El Wild Oats XI estableció el actual récord de la prueba en un día, 18 horas, 40 minutos y 10 segundos en su primera Rolex Syndey Hobart, disputada en 2005, y se ha preparado duro para lograr su cuarta victoria en tiempo real consecutiva y de paso mejorar su propia marca.


Wild Oats XI: Foto Rolex/Daniel Forster


Wild Oats XI: Foto Rolex/Carlo Borlengui

Las modificaciones para mejorar la velocidad de popa incluyen un bulbo más ligero y velas de través más grandes, al estilo de los potentes Volvo 70. A pesar de ello, el Skandia ha sido capaz de superar al Wild Oats XI cuando los 20-25 nudos del Noreste bajaron su intensidad a primera hora de ayer frente a la costa de Nueva Gales del Sur. El Skandia ha logrado navegar con mejor ángulo en condiciones de viento ligero, como indica su navegante Graeme Taylor: "Hemos acertado en algunos roles durante la noche y nos hemos aprovechado de una corriente a favor de hasta 4-4,5 nudos".

El gradiente del Norte volvía a arreciar con la llegada del nuevo día, alcanzando los 28 nudos a las 13:00 horas -hora local australiana-, lo que está favoreciendo la buena velocidad de los líderes rumbo a Tasmania. Cuatro horas más tarde, el Skandia continuaba al frente de la prueba, navegando a 15,1 nudos, 68 millas al Este de St Helens, en la costa de Tasmania, y a 190,7 millas de la llegada. El Wild Oats XI se encontraba cinco millas más cerca de la costa y 3,3 a popa del líder, navegando a 16,7 nudos y ganando terreno.

Ian Burns, navegante del Wild Oats XI, informa de que por la tarde se enzarzaron en un duelo de trasluchadas con el Skandia, y que su rival les estaba tapando muy bien los huecos. El Wild Oats XI navegaba en el momento de esa comunicación con unos buenos 28 nudos del Norte alcanzando velocidades de hasta 25 nudos con su nuevo spinnaker de 900 metros cuadrados. "Es muy buena competición, magnífica navegación", comenta Burns. "Habíamos sufrido una zona de ligera encalmada, pero ahora, con la subida del viento, estamos trabajando duro para alcanzar al Skandia".

A pesar de estas nuevas condiciones, las opciones de establecer un nuevo récord parecen desvanecerse para ambos aspirantes. Para lograrlo tendrían que llegar a Hobart antes de las 7:40 horas -hora local- de mañana, algo todavía posible si mantuvieran velocidades por encima de los 15 nudos, aunque parece poco probable, ya que la previsión habla de una nueva caída de la presión durante la noche. Esta situación ralentizará su marcha por las últimas 41 millas del recorrido a través de Storm Bay y remontando las últimas 11 millas contra la corriente del Derwent River hasta la meta.

El líder de IRC a las 17:00 horas -hora local- es el TP52 Cougar II de Alan Whiteley, seguido por el también TP52 Ragamuffin, de Syd Fischer, y el Cookson 50 Quantum Racing de Ray Roberts, los tres diseñados por Farr.

Tres barcos retirados, uno de ellos hundido


Hasta el momento se han producido tres retirados. Graeme Ainley, patrón del Farr 53 Georgia, que se hundió anoche después de que sus 14 tripulantes fueran rescatados por el Volvo 60 Telcoinabox Merit, explica las circunstancias que les llevaron a alcanzar Batemans Bay a bordo de la lancha Nemesis de la policía: "Estábamos navegando con spinnaker a unos 15 nudos de velocidad, cuando escuchamos un golpe seco seguido de un segundo bang. Creo que debimos golpear algo sólido, pero no pudimos ver qué. La pala del timón se había desprendido y el agua comenzaba a entrar por popa. En ese momento perdimos el gobierno del barco y tuvimos que arriar rápidamente el espí".


Georgia: Foto Rolex/Daniel Forster

Incapaz de detener la entrada de agua, la tripulación de Ainley decidió abandonar el Georgia. Ainley quiso destacar que el barco de salvamento JBW había manejado toda la situación "de forma excelentre y profesional", y que los cursos de supervivencia que la tripulación tuvo que completar para participar en la Rolex Sydney Hobart habían "ayudado a compleyat el rescate de acuerdo con los planes". Ainley y su tripulación pudieron contemplar el hundimiento del Georgia, afortunadamente alrededor de media hora después de su rescate y mientras esperaban a bordo del Merit la llegada del Nemesis.

El segundo retirado de la flota de 100 unidades que partió de Sidney fue el Sanyo Maris de Ian Kierman, un inmaculado Tasman Seabird de 50 años restaurado. Su problema se debió a la rotura de una pieza en la botavara de su mayor mientras navegaban bajo spinnaker en 30 nudos del Noreste frente a Jervis Bay: "No era posible repararlo, así que decidimos retirarnos alrededor de la una de la madrugada", comenta Kiernan. "Creo que en esas condiciones, y dada la regla de Green Cape, no hubiera sido razonable adentrarnos en el Estrecho de Bass". Las instrucciones de navegación insisten en el hecho de que en cuanto los barcos alcanzan la latitud de Green Cape, el último punto de tierra firme antes del Estrecho de Bass, deben declarar al JBW que se encuentran en condiciones suficientes como para seguir compitiendo.

El tercer retirado hasta el momento, el Farr 40 Inner Circle de Ken Robinson y Darren Cooney, lo hacía después de sufrir un problema con su generador. La flota de la Rolex Sydnye Hobart se ha reducido a 97 unidades navegando rumbo a Hobart.

El Wild Oats XI de Bob Oatley estableció en 2005 el actual récord de la prueba con un registro de 42 horas y 40 minutos. Para batir esa marca, el primer barco debe cruzar la línea de llegada en Hobart antes de las 7:40 horas -hora local- del domingo, 28 de diciembre.

La flota de 100 barcos que compite en esta 64ª edición de la Rolex Sydney Hobart incluye unidades llegadas de todos los estados de Australia, además de equipos de Estados Unidos, Reino Unido, Nueva Zelanda, Francia, Alemania, Holanda, Suiza, Rusia y Nueva Caledonia.